Vamos al grano. En esta nueva era de transformación digital, hablar de IA, datos u operaciones inteligentes sin hablar de conectividad es como intentar pilotar un avión a reacción sin combustible. Puedes tener los algoritmos más avanzados, una estrategia digital de primer nivel y el mejor talento tecnológico, pero sin una conectividad sólida y sin fronteras, tu ventaja competitiva tiene los días contados.
Y aunque Starlink haya acaparado titulares con su cobertura global para consumidores, en Europa está ocurriendo algo mucho más estratégico: Eutelsat Group, respaldado por una potente inyección de capital, se prepara para construir la infraestructura B2B y B2G del futuro, no para ver series, sino para mantener conectados a empresas y gobiernos, en cualquier lugar, pase lo que pase.
Si te importa la resiliencia operativa, la soberanía digital o la infraestructura escalable, lo que viene ahora será fundamental para tu organización.
1.350 millones de €: no es un rescate—es una aceleración
No se trata de mantenerse a flote. El aumento de capital de 1.350 millones de € de Eutelsat es una inversión directa en su red de satélites LEO, tras la fusión estratégica con OneWeb. Se trata de escalar, no de sobrevivir.
¿La diferencia entre Eutelsat y Starlink? Starlink va tras el mercado masivo. Eutelsat está construyendo una fortaleza en conectividad de nivel empresarial y crítica para gobiernos. Su enfoque es claro:
- Conectividad en entornos extremos
- Redes que no se caen cuando fallan los sistemas terrestres
- Enlaces garantizados para industrias que no pueden permitirse ni un segundo de inactividad
Es una jugada de alto riesgo, y representa algo que Europa no tenía desde hace décadas: una infraestructura espacial soberana y competitiva a nivel global que no responde a intereses no europeos.
Los actores estratégicos entran en escena—y no vienen por espectáculo
El gobierno francés es ahora el mayor accionista, con casi el 30 % del capital. Súmale Bharti Enterprises, el gigante naviero CMA CGM y el fondo soberano francés (FSP), y tienes una potente combinación de visión estatal y empresarial detrás del proyecto.

Seamos sinceros: los gobiernos no apuestan miles de millones en satélites por nostalgia. Lo hacen porque saben que sin una infraestructura espacial independiente, Europa sigue siendo vulnerable. En todo lo que importa.
No se trata solo de satélites. Se trata de soberanía, continuidad y del pilar de la estrategia digital europea.
Por qué esto te afecta—y por qué ahora
Si eres COO, CIO o responsable de la infraestructura digital de tu empresa, lo que está construyendo Eutelsat no es un “extra”. Es estructural.
Porque hay algo que no se dice lo suficiente:
- Las redes terrestres no llegan a todas partes
- El 5G no será realmente universal durante años—si es que alguna vez lo es
- El clima, el cibercrimen y las tensiones geopolíticas van en aumento
- Si tus operaciones dependen solo de redes terrestres, estás expuesto
Los satélites LEO ofrecen una nueva capa de conectividad constante y de baja latencia, pensada para usos industriales, no para entretenimiento. Piensa en operaciones mineras en el África subsahariana. Redes de energía renovable en zonas remotas. Plataformas offshore. Misiones humanitarias. Flujos de datos críticos que no pueden fallar.
Con la nueva infraestructura de Eutelsat, tu negocio no solo está más conectado. Está reforzado.
Un CEO con raíces operativas, no solo teoría satelital
Jean-François Fallacher asumió el cargo el 1 de junio de 2025. No es un veterano de la industria satelital—es un operador de telecomunicaciones con experiencia directa liderando Orange en Francia, España y Polonia.
Y eso importa.
Porque lo que Eutelsat necesita ahora no es más ingeniería aeroespacial. Necesita pensar como una telco moderna, operar a escala empresarial y hablar el idioma de los clientes—no solo el de los técnicos.
Fallacher ya está marcando el rumbo. Esto no va de tapar huecos financieros. Va de construir un negocio rentable, escalable y que responda a necesidades operativas reales.
2025: cobertura global. 2026–2029: expansión de nueva generación
Hablemos de plazos.
Eutelsat tiene como objetivo lograr cobertura global LEO para la primavera de 2025. No en teoría—operativa. Los contratos ya están firmados. El hardware está en producción. Y más allá de eso, la constelación de segunda generación (Gen 2) ya está en marcha.
¿Qué aporta la Gen 2?
- Menor latencia
- Mayor capacidad de transmisión
- Mayor eficiencia energética
- Integración fluida con redes terrestres y en la nube
En otras palabras: no es solo más rápido, es apto para empresas a gran escala.
La ventaja estratégica no se consigue esperando a la mayoría
Hablemos claro.
Ya sabes cómo va esto. Quienes se adelantan obtienen la ventaja. El resto llega cuando ya es tarde.
Mientras otros siguen esta historia desde LinkedIn, tú podrías estar poniendo a prueba la redundancia satelital para tus operaciones globales. Podrías estar liderando modelos de gemelos digitales para activos fuera de red. Podrías ser el referente que se mencione en las conferencias del próximo año.
Aterricémoslo con ejemplos reales:
- Una empresa logística rastreando envíos de alto valor a través de fronteras sin pérdida de señal
- Un proveedor de energía garantizando la operación continua de redes distribuidas
- Una agencia gubernamental manteniendo comunicaciones de crisis durante catástrofes naturales
La arquitectura de Eutelsat se está diseñando para estos casos de uso—y para los tuyos.
¿Qué deberías estar haciendo ahora?
Si te tomas en serio la resiliencia, empieza por aquí:
- Audita tu dependencia de red. ¿Dónde está en riesgo tu tiempo de actividad?
- Evalúa tus zonas críticas. ¿Dónde reduciría el respaldo satelital el tiempo de inactividad o el riesgo?
- Revisa las hojas de ruta de tus proveedores. ¿Tus socios tecnológicos tienen en cuenta el satélite—o siguen anclados a la red terrestre?
- Integra el espacio en tu estrategia IT. Ya no es un nicho—es infraestructura.
Europa ya decidió. ¿Y tú?
Esto es Europa tomando la iniciativa, no para seguir, sino para liderar. No para copiar, sino para diferenciarse.
Desde The Pineapple Corp., llevamos años asesorando a quienes toman decisiones sobre el futuro de la tecnología. No trabajamos con hipótesis. Observamos los flujos de capital, los movimientos industriales y las señales de infraestructura. Y cuando vemos constelaciones satelitales respaldadas por el Estado, creadas para la resiliencia empresarial, actuamos.
Esto no es un simulacro. Es la capa de conectividad de la próxima ola industrial.
Y está en tus manos aprovecharla—si actúas ahora.